Sugestión al final de la escalera.
Precursora de tantos films de terror de ayer y hoy, en Al Final de la Escalera, el húngaro Peter Medak concibe a fines de los '70 a esta criatura. Nunca mejor utilizada la palabra "criatura".
Al profesor de música John Russell (George Campbell Scott - Anatomía de un asesinato [1959], Titanic [1996]), que vacaciona junto a su familia, se le queda el auto en medio de una nevada carretera y mientras pide ayuda, es testigo de cómo un camión sale del camino e impacta trágicamente sobre su mujer (Jean Marsh - Upstairs Downstairs [1965], Frenesí [1972]) y su hija Kathy. Cuatro meses más tarde, y para intentar dejar atrás el pasado, acepta un puesto en Seattle y a través de unos amigos conoce a Claire Norman (Trish Van Devere - One is a lonely number [1972]), que trabaja para La Sociedad de Conservación Histórica, una fundación que tiene como propiedad una decrépita mansión que le ofrecen como vivienda, bajo la condición de utilizarla como sitio de práctica para sus futuros alumnos. Así es como John se muda a la antigua casona, inhabitada hace 12 años, a la que no le falta nada... hasta trae con ella un fantasma.
Aquí no hay exceso de gore, ni efectos especiales o adolescentes escapando de noche de un tipo con máscara, sin embargo, afortunadamente, cuenta con los elementos propios del cine de terror que sugiere más que mostrar, una casa encantada, un misterio bien elaborado, una bañera, grifos que se abren solos, una silla de ruedas, un pozo, una sesión espiritista, puertas que se azotan, ruidos inexplicables, especial mención para la caja de música, y una pelotita que rueda por una escalera interminable.
Un hecho muy sugerente es que John es despertado todos los días, a la misma hora, por un sonido espantoso seguido de susurros. Este y otros tantos sucesos extraños llevarán al protagonista a descubrir un desván camuflado detrás de un cuarto para cachivaches. A partir de aquí, John descubrirá que la tragedia no lo ha abandonado y que su apacible vida se convertirá en un tormento en tanto y en cuanto no averigüe qué secretos esconde ese altillo.
El talentoso George Campbell Scott encabeza el elenco, que al momento de filmar Al final de la escalera ya era considerado como uno de los actores más talentosos de Hollywood, seguido por una gloria como Melvyn Douglas (La mujer de las dos caras [1942], El quimérico inquilino [1976]) en el personaje del Senador Joseph Carmichael y con más de 70 películas en su haber.
Excelente ambientación, atmósfera sobrecogedora, historia muy bien contada, actuaciones creíbles y de gran nivel. Con muy poco logrará que esta noche no duermas. No hablemos de la casa siniestra donde John pasa sus noches y de la que cualquiera huiría despavorido la segunda vez que la pelotita rueda por las escaleras. Cualquiera menos John. Si hubiera sabido...
Título original: The Changeling.
Año: 1979.
País: Canadá.
Duración: 109 min.
Dirección: Peter Medak.
Guión: William Gray, Diana Maddox.
Reparto: George C. Scott, Trish Van Devere, Melvyn Douglas.
Género: Terror. Sobrenatural. Casas encantadas. Fantasmas. Película de culto.
Música: Rick Wilkins.
Fotografía: John Coquillon.
Año: 1979.
País: Canadá.
Duración: 109 min.
Dirección: Peter Medak.
Guión: William Gray, Diana Maddox.
Reparto: George C. Scott, Trish Van Devere, Melvyn Douglas.
Género: Terror. Sobrenatural. Casas encantadas. Fantasmas. Película de culto.
Música: Rick Wilkins.
Fotografía: John Coquillon.
El actor George C. Scott y la mansión de sus pesadillas. |